domingo, 8 de febrero de 2009

sunday morning. misa de 12:30

Más de uno se preguntará sobre qué va este post. Pues bien, ya les adelanto que no es porque me haya pasado al otro lado, sino porque una también tiene sus costumbres dominicales, y más ahora que mis ratos de ocio son escrupulosamente planificados.

Cuando era pequeña, los domingos eran el verdadero día de vacaciones de la semana, el de ir a ver el antiguo mercado de animales de la Alfalfa, el de visitar a la abuela, el de dar de comer a las palomas en el parque de al lado de casa ... pero a medida que fui creciendo mis prioridades y obligaciones fueron cambiando hasta llegar al punto en el que, durante la carrera, el domingo era un día más de la semana en el que casi todos tenían vacaciones excepto yo, o por lo menos no tanto como los demás. Pero apesar de los estudios, el domingo ha seguido manteniendo ese halo que lo hace diferente al resto de días. Quizás sea, como le dijo mi amigo Manolo a un señor mayor que andaba delante nuestra apurado por su paso lento, porque "hoy es el día del Señor". Yo no tengo el gusto de conocer a tal persona pero la verdad es que los domingos siempre han sido distintos. Y si no que se lo digan a la gente de mi barrio, pues la mayoría no falta a su cita semanal con él, bien arreglados, con sus abrigos de bisón para ellas y chaquetón verde cacería para ellos. Yo en su lugar prefiero dar un paseo y visitar el Vips, que para los de mi barrio es casi como ir a misa. Realmente no siempre lo hago pero por lo menos sí una vez al mes para comprarme el nuevo número de la revista de turno. Y a este domingo le ha tocado ser uno de esos días.

Normalmente cuando voy al Vips miro los libros de arte y arquitectura por si hay alguno de oferta. Allí me he comprado libros interesantes a muy buen precio como el de "Arte del siglo XX" de Taschen o "Sombras de Weimar: contribución a la historia del cine alemán 1919-1933". Esta vez iba en busca del último número del Ruta66 que no encontré por el camino en ningún quiosco. No lo tenían así que después de ojear unos cuantos libros me dispuse a marcharme. Pero la "casualidad" quiso que me fijara en las libretas que había en el mostrador situado a la salida, y es que éstas son otra debilidad personal.

mi vieja libreta comprada en la tienda del CAAC

mis nuevas libretas

Además de las MolesKine, Agata y Jordi Labanda de turno, estaban unas que nunca había visto antes y que eran realmente atractivas. Se componían únicamente de dos tapas exteriores de papel-cartón duro reciclado con el tamaño del formato (A5 y A6) impreso en color con la palabra Sketch al lado. Las hojas eran blancas y de un gramaje perfecto, incluso para acuarelas. Estuve abriéndolas una y otra vez, pues no hay nada que me dé más rabia que se me cierre la libreta mientras escribo o dibujo, pero éstas parecían bastantes moldeables con el tiempo. Son de formato libro y personalmente prefiero que sean apaisadas pero tampoco es un gran inconveniente. Y luego estaba el precio. La libreta A5 (tamaño cuartilla, para que se hagan una idea) antes valía 11,95 y ahora 2,95, y la A6 (la mitad que la anterior) antes 7,95 y rebajada a 1,95. Ante tal ganga no pude resistirme a la compra. Además se me estaba acabando mi libreta actual así que la mayor me venía estupendamente para usarla con mi PFC. Y es que lo de comprarme una libreta es todo un ritual y, a diferencia de mucha otra gente que es fan de un modelo o marca determinado, me gusta ir probando según me las vaya encontrando en las tiendas. Es por ello que en casa a veces acumulo libretas sin estrenar pero al final siempre les acabo dando salida. Incluso las de publicidad porque para todas hay un uso.


una tontura de vídeo para que se hagan una idea de cómo son las libretas

No he conseguido encontrar la página web de la marca de estas libretas pues las únicas palabras de referencia son muy genéricas pero casi que lo prefiero. Ya sólo me queda buscarles unas gomas a juego que las mantengan cerradas cuando se vayan abriendo con el uso. Debido al material de las tapas seguramente éstas se vayan estropeando con el tiempo pero no me importa, las que tengo ahora son parecidas y ese desgaste les da su punto.

Cuando me disponía a pagar en la caja piqué en una de esas choradas "baratitas" que suelen colocar en los mostradores. Se trata de una funda para llaves y me parecieron tan graciosas que me compré la que tenía forma de corazón para mi llave del portal de casa que es roja. ¡Queda perfecta! Esperemos que no se estropee mucho con el uso.

mi primer gift para mi llave corazón :P

Y ya por último, como no pude encontrar la revista de música, me decanté por AD (Architectural Digest) que es quizás mi revista favorita sobre decoración e interiorismo (o arquitectura de interiores, que dirían algunos). Aunque desde hace un tiempo estoy buscando la nueva revista Apartamento que debe ser como el AD pero aplicado a viviendas más pequeñas, obviamente.

En fin, que mientras otros reparan sus almas yo me gasto la paga en chorradas como éstas. Pero, ¿qué sería de la vida sin cometer estos pequeños pecados?

6 comentarios:

Porerror dijo...

Serás irreverente... ;)

orphangirl dijo...

¿tú crees? soy más bien descriptiva, no? :P
Ya en serio, espero que no se tome a mal.

GRILLO SOLITARIO dijo...

ES CURIOSO LO QUE DICES DE LOS BISONES. SEGÚN QUÉ SITIOS LA GENTE VA DE UNA MANERA U OTRA A MISA. Y CREO QUE NO SÓLO HABLO DE LA ROPA.

Fran G. Matute dijo...

El bisón es el animal de compañía más popular en ciertas zonas de la ciudad... junto con los perros cerveceros y las codornices...

"Fueraparte", lo que me ha dejado tururato es el parecido fonético entre la revista de Ana Rosa Quintana y la que a tí tanto te mola... ¿Seguro "AD" no responde en verdad a las siglas de Ana Dosa?

orphangirl dijo...

Bueno, lo del bisón es generalizar pero te puedo asegurar que bastante gente lo lleva (y a misa) en mi barrio. Y eso de animal de compañía ha estado genial, jajaja.

Respecto a lo de las revistas, es el problema de las siglas, que siempre habrá algo chungo a lo que te recuerde. Como el estudio de arquitectura MVRDV, con el que siempre está la coña de llamarlo como esa empresa de mensajería tan conocida.

GRILLO SOLITARIO dijo...

¿MVRDV? JOÉ, PARECE QUE SE LE HA CAÍDO ALGO AL TECLADO, JEJE. DESAGRADABLE ES TENER QUE PRONUNCIAR ESO.

EN CUANTO A LAS SIGLAS, LO PEOR ES CUANDO TE TOCA UNA MATRÍCULA CHUNGA EN EL COCHE, QUE ERA ALGO QUE ESTABA TEMIENDO, QUE YO REZABA PARA QUE NO ME TOCARA GKK, POR EJEMPLO.